Política de uso de Inteligencia Artificial

La Revista de Historia Universal se apoya en el Decálogo realizado por el Centro Argentino de Información Científica y Tecnológica (CAICYT-CONICET) para el uso ético de la Inteligencia Artificial en revistas científicas y académicas.

1. Autoría: debe atribuirse exclusivamente a personas que hayan realizado contribuciones sustanciales al trabajo científico. Las heramientas de IA no pueden figurar como autoras, ya que carecen de responsabilidad legal y capacidad de resonder por el contenido. Su uso debe ser reconocido, pero no atribuido como participación autoral.

2. Responsabilidad Humana: toda responsabilidad ética y legal sobre el contenido publicado recae en los autores y editores. La IA puede asistir en tareas específicas, pero no reemplaza el juicio crítico ni la toma de decisiones.

3. Transparencia: los autores deben declarar de forma explícita y detallada cualquier uso de IA en la elaboración, edición, análisis o procesamiento del manuscrito.

4. Integridad científica: la IA no es capaz de distinguir entre contenido verificado y no verificado. Su uso puede generar errores o afirmaciones infundadas. Por ello, toda información generada por IA debe ser cuidadosamente contrastada con literatura científica confiable.

5. Ética: las herramientas de IA pueden replicar sesgos sociales, culturales o disciplinares presentes en sus datos de entrenamiento. Quienes utilicen estas tecnologías deben conocer sus limitaciones y aplicar juicio ético al emplearlas.

6. Documentación: todo proceso que implique el uso de IA debe estar debidamente documentado. Se debe incluir información sobre qué herramientas fueron utilizadas, para qué tareas específicas, con qué parámetros, y que tipo de supervisión o edición humana se realizó.

7. Verificación: ningún contenido asistido por IA debe publicarse sin una revisión humana exhaustiva. Se debe verificar la coherencia, exactitud, originalidad y adecuanción ética del contenido. Ademásm si se utilizó IA para el análisis de datos, se recomienda una auditoría metodológica o validación independiente.

8. Límites: el uso de IA debe restringirse a tareas auxiliares como resumen de textos, correción gramatical, análisis estadístico, traducción, o generación de tablas o gráficos. No se puede utilizar para redactar secciones clave del artículos como la discusión, la interpretación de resultados o las conclusiones, que exigen razonamiento científico, análisis crítico y responsabilidad.

9. Citación: las herramientas de IA no deben citarse como fuentes primarias. Si se utilizaron para generar parte del contenido, su mención debe realizarse en la metodología o en los agredecimientos, según corresponda. Debe asegurarse no incluir bibliografía ficticia generada por IA. Todas las referencias deben ser verificadas.

10. Educación y actualización permanente: Autores, revisores y editores deben capacitarse de manera continua en el uso ético, técnico y legal de la inteligencia artificial.